Antonino González, el hijo de Jorge González, le escribió una carta al cumplirse un año del accidente cerebrovascular que sufriera el músico chileno.
Cuando el primogénito del líder de Los Prisioneros, se enteró del estado de salud de su padre, no dudó en dejar su vida en Viña del Mar y trasladarse a Santiago para cuidarlo, revela información del periódico El Mercurio.
Antonino afirmó que cuando llegó a Santiago fue un golpe duro ver como su padre que siempre había sido una persona autosuficiente se encontraba en una situación que le llevaría un largo tiempo de recuperación.
“Lo recuerdo despierto en la clínica, pero muy estresado, preocupado y muy frustrado de no haberse dado cuenta de lo que le estaba pasando”, dijo.
Al recordar su infancia al lado de Jorge González declaró que “crecer con su música siempre fue un regalo”, que sus canciones estaban merodeando y se las aprendió, “simplemente están en mí”.
Aseguró que ha sido difícil porque no te imaginas que sea la vida que pasas al lado de tu papá, pero que verlo surgir y esforzarse ante toda adversidad es lo más rescatable de todo. Además de que ha aprendido a admirar más a su padre como persona.
